jueves, 9 de abril de 2009

¿Amamantar a mi bebé puede afectar mi deseo sexual?

Escrito para BabyCenter en Español


Es posible, pero puedes estar segura de que la ausencia del deseo sexual no será permanente. Hay varios factores que pueden hacer que disminuya tu interés en tener relaciones con tu pareja. El más obvio es el agotamiento físico que afecta a prácticamente toda mujer en el periodo de posparto, el cual puede ser aún más intenso si tú — y solamente tú — cuentas con el "equipo" necesario para alimentar a tu pequeño cuando se despierta a las 3 de la mañana con hambre. Además, el constante y estrecho contacto físico que necesariamente tienes con tu bebé al amamantarlo cada dos horas (así como al mecerlo, cambiarlo y tenerlo en brazos), puede hacer que necesites un respiro al final del día, y que no te muestres tan receptiva a las caricias y al acercamiento físico de tu pareja. Por último, la lactancia puede prevenir la ovulación durante varios meses tras dar a luz. Desafortunadamente, la falta de ovulación significa que el nivel de estrógeno que ahora circula por tu organismo es muy inferior a lo normal, provocando sequedad vaginal y una disminución general en el apetito sexual. Por supuesto que cada mujer es diferente, y muchas mamás dicen que la lactancia no les afecta el interés sexual de ninguna manera. Algunas hasta se sienten más sexy, puesto que dar el pecho puede ser una experiencia muy agradable, y hasta sensual, que muchas veces se traduce en un comportamiento más amoroso y romántico con tu pareja (sin contar el hecho de que tus senos estarán más grandes y firmes). Amamantar también puede hacer que valores más tu propio cuerpo y esta actitud favorable puede influir positivamente en los momentos íntimos con tu pareja. Si no estás entre las mamás que se sienten así, recuérdate a ti misma (y a tu pareja) que es natural que mientras estés amamantando no te apetezca tanto tener relaciones sexuales. Pero sí es importante mantener una buena comunicación con tu pareja y buscar otras formas de compartir momentos de cariño e intimidad (como bañarse juntos, darse masajes, o pasear al bebé cogidos de la mano). Si el desinterés sexual te desanima, piensa en el futuro y en los motivos por los que has decidido amamantar. Probablemente, como muchas madres, decidirás que este pequeño contratiempo es un precio que estás dispuesta a pagar a cambio de los grandes beneficios de salud y el intenso acercamiento con tu bebé que brinda la lactancia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

konsidero que siempre deve de haber una buena comunicacion con tu pareja de decir hoy no por que me siento cansada y que te parece si mañana o bien tu cuidas al bebe un rato mientras yo descanso durante el dia, para estar al 100 en la noche